Hay muchas ideas alrededor de la contratación de millennials, pues se cree que no se comprometen con una organización, que no se entregan y, por ende, cambian de trabajo con facilidad; sin embargo, no se puede pasar por alto el que ellos sean el capital humano del presente y del futuro cercano.
Actualmente, muchas empresas conocen esa realidad y suman a sus filas a estos jóvenes nacidos entre 1981 y 1995, alrededor de 30 millones; la cuestión es que no saben realmente cómo hacerlo ya que no comprenden que los procesos de contratación tradicionales no son suficientes: se quedan cortos.
“Los millennials demuestran que contratar de forma obsoleta tiene tantos problemas como un mal manejo de recursos humanos. Si las empresas realmente están buscando personas que hagan carrera en su organización y se comprometan, deberán analizar cómo los están atrayendo y qué les están ofreciendo para quedarse; qué lenguaje están usando y para qué quieren a gente de esta edad que, por cierto, hoy ya están tomando los puestos directivos de las compañías”, afirma Alberto Álvarez Morphy, director general de IncentivAction.
Estas son algunas acotaciones que las empresas deben tomar en cuenta a la hora de contratar millennials.
- Tus clientes y los millennials son similares: ambos cuentan con mucha más información de la que tenían antes para tomar una decisión, de compra o laboral. Ambos están acostumbrados a la eficiencia y comodidad gracias a la tecnología, que ha tenido un avance acelerado desde el siglo pasado. Ambos viven con información y gusto por las experiencias únicas, como parte de su cotidianidad.
- Los procesos de contratación largos y complicados, fuera de ser innecesariamente costosos, no garantizan que encontrarás al mejor talento. Algunos aspirantes se alejarán por notar una empresa que no se adapta ni actualiza. Por otro lado, el uso de pruebas psicométricas tradicionales, la subjetividad en las entrevistas y la falta de evaluación de lo que realmente importa (actitud, capacidad, conductas, potencial, etc.), darán como resultado contrataciones no ideales. Todo esto te costará mucho dinero y esfuerzo, tanto en el proceso de reclutamiento, como en la rotación de personal.
Tu empresa, quizá, se ha adaptado a vender a los clientes de hoy: tal vez tienes una estrategia de marketing digital, aprovechas las redes sociales para crear comunidades con tus audiencias, tu sitio en línea está optimizado para buscadores y el e-commerce es tu fuente principal de ingresos, no obstante;
“Si no te has adaptado en materia de recursos humanos, para atender las necesidades y problemas de tu propia gente, y que ellos también tengan una experiencia satisfactoria; entonces, tienes una bomba de tiempo entre las manos. Contratar más millennials no es la solución a tus problemas; saber cómo encontrar a los mejores y que se queden contigo es lo que te ayudará a competir en el mundo de hoy”, puntualiza Álvarez Morphy.
Fuente: Mundo Ejecutivo