
Pese a las proyecciones en el incremento de la tasa de interés por parte de BanRep –situación que en algunos casos se presumía ocurriría hasta dos veces en el año comenzando en abril, como lo proyectaba el economista Munir Jalil, de BTG Pactual–,no habría tal, por lo menos por el momento.
Esto piensan los expertos luego de que el martes pasado (05 de marzo) el Departamento Administrativo Nacional de estadística (DANE) revelará que el incremento de los precios al consumidor en febrero fue de 0,57 %, un 0,16 % por debajo de lo presupuestado; lo que, al ubicar la inflación en 3,01 % anual –la más baja desde agosto de 2014– sumado a un crecimiento económico menor al crecimiento potencial, serían razones más que suficientes para que el Banco de la República retrase los incrementos en la tasa de interés, incluso hasta el próximo año.
Redacción INCP a partir del artículo publicado por Portafolio
Para mayor información, puede revisar el artículo titulado “¿Qué viene ahora en tasas de interés tras resultados de la inflación?”, de la fuente Portafolio.
¿Qué viene ahora en tasas de interés tras resultados de la inflación?
La baja inflación que registró Colombia en febrero jugaría a favor de que el Banco Central aplace el inicio de los incrementos de su tasa de interés, e incluso podría llevar a que la deje estable durante este año.
El DANE reveló que los precios al consumidor subieron un 0,57 por ciento en febrero, mucho menos que el 0,73 por ciento que esperaba el mercado.
El dato sorprendió por segundo mes a la baja a los agentes.
El indicador se situó en un 3,01 por ciento anual, su registro más bajo desde agosto de 2014, y apenas por encima de la meta puntual del banco emisor de 3 por ciento.
«En ausencia de presiones inflacionarias y con una brecha negativa de crecimiento, es decir, con el crecimiento económico creciendo todavía menos que el potencial, no hay afán de iniciar un proceso de normalización con incrementos de la tasa», dijo Munir Jalil, economista jefe de BTG Pactual para Colombia.
Hasta mediados de enero, Jalil proyectaba dos incrementos de la tasa de interés este año, comenzando en abril.
El tipo referencial se sitúa en un 4,25 por ciento desde abril del año pasado, cuando la autoridad monetaria lo redujo en 25 puntos base para propiciar una recuperación de la economía, que en 2018 se expandió un 2,7 por ciento desde el 1,4 por ciento que marcó el año previo.
Según la media del más reciente sondeo de Reuters –antes del dato de inflación de febrero–, los analistas esperaban que el banco central incrementara en dos ocasiones su tasa para llevarla hasta un 4,75 por ciento a finales del año.
«Con esto, las expectativas de incremento de la tasa, por lo menos para el primer semestre, se están evaporando y ahora a lo sumo habría un incremento en el segundo semestre», dijo Wilson Tovar, gerente de Estudios Económicos de la correduría Acciones y Valores, cuya visión cambió frente al mes pasado, cuando esperaba dos incrementos, comenzando en abril.
El comportamiento de la inflación llevó a una valorización de la curva de rendimientos de la deuda pública interna.
En el caso de los referenciados títulos TES con vencimiento en julio del 2024, se valorizaban a un rendimiento de 5,90 por ciento, desde el cierre del martes de 5,99 por ciento.
«Cuando la variación de los precios tiene el comportamiento visto en Colombia en los últimos meses, la prima de riesgo inflacionario cobrada por los inversionistas tiende a reducirse», explicó un informe de Bancolombia.
Fuente: Portafolio