La trasformación de la economía global está determinada por la generación Z

La generación de valor a largo plazo aunada al desarrollo sostenible es cada vez más la prioridad de los inversionistas transformando la forma en que se desarrolla la economía.
La generación Z (aquellos nacidos entre 1996 y el 2016) representa un tercio de la población mundial y se caracteriza por ser más propensa a estar conectados a internet la mayor parte del día. De acuerdo con una encuesta dirigida por la Central Generational Kinetics en Estados Unidos, el 58% de la Generación Z no se sentiría cómoda si no tuviera internet durante más de cuatro horas al día y pasará alrededor de 6 años de su vida en las redes sociales.
Estas condiciones de nativos digitales hacen que las personas de esta generación sean más conscientes de los impactos generados sobre la sociedad y el medio ambiente. Dado que actualmente una gran cantidad de personas de esta generación se incorporan al mercado laboral, las empresas han ido progresivamente orientando sus objetivos hacia el desarrollo sostenible, transformando y mejorando los productos del mercado. Tal situación obliga a las otras generaciones a adaptarse a esta y no al contrario.
Se estima que los ingresos de esta generación crecerán un 140% en los próximos cinco años, representando $33 trillones de dólares en 2030, alcanzando el 27% de los ingresos globales y superando los ingresos de los Millennials al año siguiente.
Redacción INCP a partir del artículo publicado por Semana.
Para más información consulte el artículo titulado “¿Por qué la generación Z cambiará la economía?” publicado por Semana.
¿Por qué la generación Z cambiará la economía?
La forma en que se está transformando la economía en el mundo es innegable, cada vez más el mundo de los negocios y de las inversiones han tomado una nueva óptica y más que la generación de riqueza, los grandes inversionistas cada vez están priorizando la generación de valor a largo plazo y el desarrollo sostenible.
Mirova, gestora de inversiones sostenibles de Natixis IM, explica cómo esta tendencia se seguirá perpetuando gracias a la influencia de la generación Z, la cual está conformada por aquellas personas que nacieron entre 1996 y el 2016.
La generación Z es bastante particular. Hoy representa un tercio de la población mundial. Se caracteriza porque nunca conocieron un mundo sin Internet y son más propensos a estar conectados durante la mayor parte del día. Incluso, pasan más horas en línea que cualquier otra generación, por lo que les costaría mucho lidiar con la falta de conectividad: “según una encuesta dirigida por la Central Generational Kinetics en Estados Unidos, el 58% de la Generación Z no se sentiría cómoda si no tuviera internet durante más de cuatro horas”.
Otro elemento clave es el papel que desempeña lo digital en la vida de la Generación Z: la línea que separa su vida online de la offline es, como mínimo, borrosa: según la misma encuesta, el 64% de la Generación Z dijo que, en los próximos cinco años, espera que Internet determine lo que hace a diario.
“La generación Z pasará casi 6 años de su vida en las redes sociales, lo que supone más tiempo que el dedicado a comer, estudiar y socializar juntos. Lo hacen todo online, desde comprar hasta dar su opinión: son la generación más diversa, vivieron más de una década de movimientos por los derechos sociales y crecieron conscientes del cambio climático”, explica Mirova.
Cambios en las empresas y en los negocios
Esta generación se caracteriza, además, por ser más consciente del impacto que genera sobre la sociedad y el medio ambiente, y es precisamente lo que los hace diferentes a las generaciones anteriores.
Actualmente, una porción importante de estas personas se está incorporando al mercado laboral y, en este proceso ha quedado en evidencia que la mayoría de ellos se inclinan por las empresas más sostenibles.
“Creemos que las demás generaciones tendrán que adaptarse a ellos, y no al revés, y más vale que lo hagan rápido y de forma sostenible, ya que creemos que la disrupción de la Generación Z está en marcha”, asegura Mirova.
Sin duda, la generación Z representa un cambio de juego para las empresas, ya que, aunque en muchos casos puedan tener el mejor producto del mercado, si muestran malas prácticas sociales y medioambientales, es posible que la Generación Z no quiera consumir sus productos, y aunque parezca irrelevante eso va a ser un problema, dado que ellos tendrán una gran parte de los ingresos en la próxima década.
De hecho, tan solo en los próximos cinco años, los ingresos de la generación Z crecerán un 140% en los próximos cinco años, representando $33 trillones de dólares en 2030, alcanzando el 27% de los ingresos globales y superando los ingresos de los Millennials al año siguiente.
“Para la generación Z, o lo haces bien o no lo haces. En este sentido, pensamos que, para la Generación Z, si un producto tiene un costo medioambiental o social, no sólo se abstiene de comprarlo, sino que expresa su opinión en las redes sociales. Las empresas tienen que empezar la transición hacia la sostenibilidad”, concluye Mirova.
Fuente: Semana