Cómo ser emprendedor sin dinero o experiencia. Consejos y herramientas

Cómo ser emprendedor sin dinero o experiencia. Consejos y herramientas

A pesar de que parezca absurdo o un despropósito en sí mismo, es completamente posible constituirse en un emprendedor sin dinero o experiencia. Emprender es un verbo, no necesariamente un estado. O para ser más preciso, posiblemente deba afirmarse que es el verbo que genera el estado.

Ahora bien, en tanto menos dinero y experiencia, más inteligencia y trabajo son necesarios. Es bonito ese canto de sirenas que invita a ser “el propio jefe”. El que toma todas las decisiones y alcanza las metas. Pero el emprendimiento es una tarea sumamente compleja.

¿Qué tan compleja?

Pues al menos 75 % de las start-up fracasan. Y esto tomando en cuenta las estadísticas en las economías más avanzadas.

Por otra parte, y a nivel personal, los emprendedores son personas mucho más ansiosas que las demás y experimentan mayor estrés en el día a día. Después de todo, cuando alguien es único responsable de los resultados es lógico que cargue con todo el peso de las cosas.

Las buenas noticias también son bastante conocidas: el emprendimiento es la mejor opción de crecimiento profesional. Y uno de los aportes más importantes que las personas le pueden hacer al mundo en el que viven. Por lo tanto solo es necesario estar consciente de las dificultades y poseer la disposición de aprender lo necesario para superarlas.

Para ser un emprendedor sin dinero o experiencia hay que tomar en cuenta lo siguiente:

Identifique una idea rentable para desarrollar una start-up

1.- Pregunte a sus amigos y conocidos qué los molesta.

Los fundadores de emprendimientos siempre obtienen inspiración de sus frustraciones. Travis Kalanick y Garret Camp comenzaron Uber después de tener problemas para conseguir un taxi. Andrew Kortina e Iqram Magdon-Ismail fundaron Venmo (adquirido por PayPal) después de que tuvieron problemas para pagar cuentas mutuas con cheque. Chris Riccobono lanzó UNTUCKit, una línea de camisas que se ve bien sin abrochar después de sentirse frustrado por lo arrugadas y mal ajustadas que eran sus camisas normales.

Tomando en cuenta esto, pida a sus amigos que hagan un seguimiento de las cosas cotidianas que los molestan. Luego revise esas listas y busque problemas que pueda resolver.

2.- Prepárese para el futuro.

A medida que el mundo cambia, las personas necesitan diferentes productos. Como ejemplo, el auge de Uber, Lyft y otras aplicaciones de “viajes compartidos” generó la demanda por otras aplicaciones que proporcionaran las tarifas más baratas en un momento dado.

Si quiere adelantarse a la curva de innovaciones lea las predicciones de tendencias para su industria o mercado. O consulte publicaciones de pronósticos de tendencias universales como Trend Hunter o la similar de Springwise. Luego pregúntese: «si estas predicciones se hacen realidad, ¿qué herramientas serán necesarias?».

3.- Revise internet.

Contemplar lo que otras personas han inventado es una excelente manera de activar procesos de pensamiento propios con alto nivel de creatividad.

Para obtener inspiración en aspectos digitales, revise periódicamente sitios como Product Hunt, una plataforma siempre actualizada de aplicaciones, sitios web y juegos más recientes. En tanto Kickstarter es ideal para productos físicos.

4.- Haga algo mejor o más barato.

No siempre es necesario desarrollar algo nuevo. Existe la posibilidad de ofrecer un producto existente a un precio más bajo, mejor calidad o, idealmente, ambos. Así se garantiza una buena cantidad de clientes, pues se trabaja en segmentos y nichos que tienen dinámicas establecidas.

Manténgase pendiente de todo lo que ve y usa. Luego revise esos registros mentales y busque algo que pueda mejorar.

5.- Enfóquese en una categoría de negocios que esté en crecimiento.

Los negocios en crecimiento ofrecen muchas oportunidades, justamente porque su propia dinámica impide que todos los detalles estén considerados. Identificar una categoría de negocios en franco crecimiento y evaluar con minuciosidad aspectos que puedan faltar habilita interesantes opciones de negocio.

Después de elegir una categoría debe estudiar todos los productos incluidos en ella. ¿Cuáles son los beneficios de cada producto y cómo varían? ¿Cuál es su estrategia de empaque y marketing? ¿Cuáles son las posibles mejoras?

Una vez que haya elegido un producto, considere preguntas como ¿qué se puede hacer para mejorarlo? ¿Puedo agregar una nueva función? ¿Se puede considerar un material diferente? ¿Puedo personalizarlo de alguna manera?

6.- Trabajar con alguna demanda insatisfecha.

No necesita “reinventar la rueda” si no hay suficientes “ruedas”. Muchos comienzan negocios exitosos después de identificar una brecha en el mercado. 

Otras sugerencias:

  • Conéctese con otros emprendedores:el trabajo en red no solo ayuda a construir relaciones valiosas, también proporciona muchas ideas.
  • Investigue patentes disponibles:no se trata de copiar ningún invento, sin embargo, navegar a través de esos documentos puede dar muy buenas ideas.
  • Realice una sesión de lluvia de ideas:invite a otras personas con mentalidad empresarial a una sesión de lluvia de ideas. Pídales que vengan preparados para discutir una determinada categoría de producto o alguna pregunta concreta: «¿cuál es su tipo favorito de X y por qué?» o «¿utiliza algo para lograr Y?, ¿por qué o por qué no?». Las respuestas pueden conducir a ideas geniales.

Valide la idea para la start-up

Una vez que la idea merece consideración el proceso solo se inicia para el emprendedor sin dinero o experiencia. Nada ha terminado aún. Es necesario definir el grado y nivel de interés que la idea tendrá para otras personas.

Para esta validación ayuda mucho desarrollar un Producto Mínimo Viable (PMV). Un PMV es la versión más simple y básica posible del producto o servicio pensado. Es lo suficientemente funcional para satisfacer a los primeros clientes y tener una idea de lo que se debe mejorar.

Por ejemplo: si se piensa crear una aplicación que conecte a los estudiantes universitarios con tutores virtuales, se puede crear una versión básica, invitar manualmente a tutores encontrados en línea para unirse y luego publicar el enlace a la aplicación en la página de Facebook de la universidad. Si obtiene un número decente de suscripciones, es señal de que se debe avanzar. Si apenas se obtiene alguna, debe reconsiderarse la idea o comenzar de nuevo.

Entrevistas con clientes potenciales es otra opción. Haga demostraciones funcionales de su producto, pregúnteles qué les gusta y qué no, cuánto pagarían por él, con qué frecuencia lo usarían, etc.

También es recomendable «enumerar los problemas que supuestamente el producto resolverá y luego pedir opiniones y clasificar cada una».

Si desea verificar el interés del mercado antes de cualquier desarrollo, se puede habilitar una página web que describa el producto o servicio. Solicite a las personas que envíen sus direcciones de correo electrónico a cambio de un acceso temprano, suscripción gratuita, membresía, descuento, actualización de producto u otra oferta atractiva. Luego promocione el producto en redes sociales, búsqueda paga, etc., y verifique cuántos visitantes se convierten en suscriptores.

Encuentre un cofundador

La sabiduría convencional recomienda que un emprendedor sin dinero o experiencia busque un cofundador al comenzar un negocio. Hay tres ventajas fundamentales en ello:

  1. Es más fácil obtener financiamiento.Muchos inversores de riesgo son reacios a respaldar a emprendedores en solitario.

Muchos estudios han determinado que el «fundador único» es de las principales razones de fracaso de una start-up. Paul Graham de Y Combinator escribe: «¿Alguna vez han notado que pocas start-up exitosas fueron fundadas por una sola persona? Parece poco probable que sea una coincidencia».

  1. Se cuenta con apoyo emocional.Dirigir una empresa es una experiencia estresante, emocionante y única. Es muy difícil estar solo en esa montaña rusa emocional. Un cofundador entiende exactamente esto y ayuda a sentirse menos solo en el empeño.
  1. Pueden aportar con diferentes habilidades, conocimientos y conexiones.Posiblemente uno sea excelente vendedor y el otro fundamento en la parte técnica. Puede poseer conexiones útiles para el negocio o capacidades de gestión. Elegir un cofundador con capacidades complementarias es una excelente manera de aumentar las probabilidades de éxito.

Sin embargo, también existen inconvenientes con un cofundador.

  1. Existe conflicto.En algunas situaciones existirán inevitables desacuerdos. Pequeñas desavenencias son saludables y productivas, pero si no encuentran una solución rápida, se perderá tiempo y energía valiosa. Y además se puede dañar la moral del equipo.
  1. Debe dividirse el patrimonio.Si usted es el único propietario de su empresa tiene 100 % de esta, aunque ello amerita una consideración especial tratándose de un emprendedor sin dinero o experiencia.
  1. No es sencillo encontrar un cofundador.Puede ser difícil hallar alguien con la misma ética comercial, hábitos de trabajo y personalidad complementaria. Una persona que además crea en la misma visión, contribuya con sus habilidades y tenga el deseo de ser su cofundador (en primer lugar).

Todo lo anterior establece dificultades que no se pueden subestimar.

¿Dónde encontrar un cofundador?

Si decidió favorablemente respecto a un socio fundador, el siguiente paso es encontrar uno. Explore primero en su propia red de contactos. Alguien que ya conoce o por quien las conexiones puedan responder es menos arriesgado que recurrir a un extraño.

También puede asistir a eventos sobre emprendimiento en los que eventualmente pueda conocer socios potenciales.

Consideraciones en caso de optarse por un financiamiento para activar el emprendimiento.

El financiamiento es una alternativa a los socios inversores o capitalistas y otro mecanismo funcional para el emprendedor sin dinero o experiencia.

Evidentemente constituye una deuda, un pasivo para el proyecto y el emprendedor. Pero la realidad es que la deuda no es ni buena ni mala, simplemente es más o menos necesaria. La virtud se encuentra en establecer dominio sobre ella.

El financiamiento para el proyecto puede encontrarse en las siguientes fuentes:

1.- Consulte a sus amigos y/o familiares para que inviertan en su negocio.

Muchos empresarios confían en sus amigos y familiares para una inversión inicial, típicamente llamado «capital semilla». Se pueden intercambiar fondos por una participación patrimonial en el proyecto (por ejemplo, el primo que recibe 4 % de la empresa después de invertir $ 12.000), solicitar préstamos personales (con o sin intereses) o incluso donaciones. 

2.- Aplicar para alguna subvención a pequeñas empresas (si los programas estuvieran disponibles en la oferta económico-financiera del medio).

Muchos gobiernos (federales, estatales y locales) tienen programas para ayudar a pequeñas empresas, incluidos préstamos a bajo interés, capital de riesgo y subvenciones. Haga una prospección minuciosa de estas opciones. La mayoría de las empresas no son elegibles, por lo que es posible que no encuentre nada. Sin embargo, vale la pena investigar porque finalmente es “dinero gratis”. 

3.- Evalúe plataformas de crowdfunding.

Este método no solo genera capital, también puede ayudarlo a obtener retroalimentación temprana del producto, conocimiento de la marca y, a veces, si tiene una historia interesante o un producto especialmente genial, cobertura de prensa. Es un mecanismo muy útil para el emprendedor sin dinero o experiencia. 

4.- Recurra a “inversores ángeles”.

Los inversores ángeles buscan compañías que se encuentren en la etapa inicial de su ciclo de vida y en las que el capital invertido pueda llegar a ser diez veces su tamaño original. Por lo general invierten entre $ 25.000 y $ 100.000. Si hace bien los números, los inversores ángeles están buscando negocios que puedan alcanzar un valor de $ 2.5 a $ 10 millones en el futuro.

Ellos serán extremadamente diligentes para asegurarse de que usted comprenda bien a sus clientes objetivo, el espacio que ocupará el producto, la forma en la que ganará dinero y cómo escalará la operación.

Asegúrese de estar preparado con un plan de negocios sólido y señales tempranas de tracción del proyecto (por ejemplo, «el usuario promedio refiere a dos prospectos adicionales en su primera semana» o «duplicamos nuestros ingresos de enero a marzo»).

La financiación de un “ángel” habitualmente viene asociada a su experiencia y conexiones. Y como pago del capital se negociará una cuota de participación en el negocio.

5.- Solicite capital de riesgo.

Las empresas de capital de riesgo buscan organizaciones privadas jóvenes. Al igual que los inversores ángeles, estas firmas de capital privilegian inversiones riesgosas y de alto rendimiento. Los retornos que esperan dependen de cuán maduro sea el proyecto. Si invierten justo antes que la empresa se haga pública o sea adquirida, un retorno de 3X es bueno. Pero si una empresa de capital de riesgo invierte temprano probablemente esté buscando un rendimiento de 7X a 10X. 

6.- Use una tarjeta de crédito como una opción de efectivo a corto plazo.

Por lo general no es buena idea usar una tarjeta de crédito para pagar gastos comerciales, a menos que, por supuesto, pueda cubrir la cuenta. Y a veces no existe otra opción: se necesita dinero y rápido. Cuide de no sacrificar su puntaje de crédito y no acumule deudas innecesarias porque eso dañará su negocio a largo plazo (sin mencionar su salud financiera personal). 

7.- Obtenga un microcrédito.

No puede solicitar créditos bancarios convencionales al inicio de sus operaciones, puesto que los financiadores no están dispuestos a hacer una inversión de tan alto riesgo. Sin embargo, puede aprovechar programas de micropréstamos que muchas de estas mismas organizaciones ofrecen de manera independiente. 

8.- Financiamiento con recursos propios.

Si bien estas son recomendaciones que ayuden al emprendedor sin dinero o experiencia, también es cierto que no necesita aceptar dinero de nadie si no lo desea.

Algunas empresas no recaudan fondos en absoluto. Sus fundadores pagan los costos iniciales por sí mismos y luego, cuando la empresa se vuelve rentable, sus ingresos cubren todos los gastos.

Esta opción le permite a usted (y a su cofundador, si tiene uno) conservar un porcentaje mucho mayor de la empresa, pero puede crecer con más lentitud. Si decide arrancar de esta forma, mantenga su presupuesto lo más liviano posible. Para extender la vida del negocio hasta el momento preciso que pueda sostenerse solo.

Cómo corporativizar su negocio.

En cierto punto, debe decidir si desea convertir su negocio en una organización con estructura y personería jurídica propia.

Como propietario único, usted y su empresa se consideran la misma entidad. En tanto que si se corporativiza, el negocio se separa. Desde un punto de vista legal, puede comprar y vender propiedades, activar impuestos varios, demandar y ser demandado, establecer contratos, etc.

Las ventajas de corporativizar.

Primero, y por sobre todo, corporativizar lo protege de las deudas y obligaciones comerciales. Los acreedores solo pueden solicitar el reembolso de los activos de la empresa, no de los suyos personales (como su casa, automóvil, cuenta bancaria, etc.).

Tampoco es legalmente responsable por las acciones de la corporación (aunque esto depende del medio en el que se esté operando). Por el contrario, como propietario único, cualquier persona que demanda a su empresa lo está demandando a usted mismo.

Tener una empresa le permite transferir acciones. Puede vender parte de su propiedad, transferirla o regalarla. Si desea aceptar inversiones externas o traer un socio a bordo, necesita este marco legal.

Corporativizar también le da más credibilidad, lo que lo ayuda en la atracción de capitales e inversiones.

Las desventajas de corporativizar.

Eventualmente genera cargas impositivas adicionales. Debe presentar periódicamente una declaración ante el Estado y pagar tarifas anuales. El proceso puede llevar bastante tiempo, y contratar a un abogado y contadores tiene un costo aparte.

No es indispensable corporativizar el negocio, hay una variedad de estructuras comerciales para elegir. Pero si tiene un socio, necesita financiación externa y desea protección legal, es una buena idea.

Una vez que haya decidido corporativizar debe elegir entre convertirse en una sociedad de responsabilidad limitada o una sociedad anónima. Los contadores y consejeros legales tendrán que emitir su opinión al respecto.

Fuente: Emprendices 

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