Impuesto a los cigarrillos aumentará $700
El Gobierno ha establecido que el impuesto a los cigarrillos pasará de $1.400 a $2.100. Esta tarifa proviene del IPC más cuatro puntos. El aumento impactará a los consumidores, y se espera que se reduzca el consumo ─y a su vez se presenten menos casos de enfermedades crónicas asociadas al tabaco─ y se aumente la recaudación para la salud, lo que permitiría tener más dinero para tratar las enfermedades asociadas al tabaco.
Redacción INCP a partir del artículo publicado en Dinero
Para mayor información, puede revisar el artículo titulado “Impuesto a los cigarrillos aumentará de $1.400 a $2.100, recalca el Gobierno” de la fuente Dinero.
Impuesto a los cigarrillos aumentará de $1.400 a $2.100, recalca el Gobierno
En adelante, éste valor se incrementará en la inflación más cuatro puntos. La base gravable corresponde al precio de venta al público efectivamente cobrado en los canales de distribución clasificados por el DANE como grandes almacenes e hipermercados minoristas, recalcó el Gobierno Nacional.
La Dirección General de Apoyo recalcó en un documento conocido por Dinero que la tarifa del impuesto al consumo de cigarrillos y tabaco elaborado en su componente específico aumentará para 2018 de $1.400 a $2.100.
La entidad aclaró además que, en adelante, la tarifa del impuesto se incrementará en el IPC más cuatro puntos.
“En lo que hace al componente ad valorem, la base gravable corresponde al precio de venta al público efectivamente cobrado en los canales de distribución clasificados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE) como grandes almacenes e hipermercados minoristas, actualizado en todos sus componentes en un porcentaje equivalente al del crecimiento del índice de precios al consumidor”, agrega la entidad.
Es decir, en uno y otro caso la actualización se encuentra ligada como mínimo al IPC, motivo por el cual de mantenerse el mismo nivel de consumo, podría suponerse que el impuesto estaría por encima de la inflación.
Según el Ministerio de Hacienda, esta medida se tomó con el fin de desincentivar el consumo de estos productos, acercando el impuesto a los estándares internacionales, y de paso, generar mayores recursos para la salud.
La cartera de Hacienda también recalcó que dicho impuesto se pasa en alguna medida a los consumidores en forma de precios de venta más altos, lo que lleva a la reducción del consumo y, por ende, a resultados positivos sobre la salud.
Pero además ha aclarado que en la medida en que ello no ocurra (la reducción del consumo), el impuesto genera ingresos fiscales para contribuir a financiar los gastos que su consumo acarrea para el sistema de salud pública.
Algunos estudios, citados por las autoridades, han concluido que el pass-through a los consumidores a través del precio de venta ha sido muy bajo, menos de la mitad del impuesto, principalmente por diferenciación tarifaria al interior del país; mientras otras experiencias muestran un pass-through del cien por ciento y en casos específicos, un traslado más que proporcional del impuesto.
Todo lo anterior, va en línea con la evaluación de acceso a la OCDE por parte del Comité de Salud del 2015, donde se recomendó al gobierno colombiano: mantener su compromiso de transferir más recursos al sector salud mediante la creación de impuestos dirigidos a productos que pueden contribuir a la carga de enfermedades crónicas: tabaco, bebidas alcohólicas, bebidas azucaradas.
Sumado a lo anterior, señalan las autoridades, el impuesto al consumo de cigarrillos y tabaco elaborado en Colombia es bajo en comparación con estándares internacionales y se considera necesario desincentivar el consumo mediante el incremento de la carga tributaria, teniendo en cuenta las externalidades y costos que esto representa para el Sistema General de Seguridad Social en Salud.
Carga financiera
La morbilidad y mortalidad asociada al tabaquismo genera una carga financiera importante sobre el sistema de salud. Diversos análisis citados por el Gobierno Nacional estiman que el costo anual directo en el sistema de salud, atribuible al tabaquismo es de 4,26 billones de pesos.
La tributación al tabaco es una medida efectiva
La evidencia empírica internacional, citada por el Gobierno, muestra de manera robusta que la tributación al tabaco se constituye en una medida excepcionalmente efectiva para reducir los efectos negativos generados por el consumo del tabaco.
De acuerdo con la evidencia internacional, el aumento del impuesto al tabaco contribuye, según los mismos reportes de las autoridades del orden nacional a:
1. Que fumadores dejen de fumar o reduzcan el consumo de tabaco. Según la OMS (2015), el aumento del impuesto del tabaco se constituye en la medida más efectiva para reducir el consumo.
2. Prevenir que otras personas empiecen a fumar, particularmente los jóvenes y los más pobres.
3. Reducir la carga de enfermedades no transmisibles en el mediano y largo plazo.
4. Reducir el gasto asociado a las enfermedades relacionadas con el consumo del tabaco, las cuales tienden a ser excesivamente costosas.
5. Generar recursos adicionales que pueden ser utilizados para financiar programas de salud y/u otros servicios públicos.
“Cabe mencionar que el incremento de los impuestos al tabaco es una medida relativamente económica y (técnicamente) fácil de implementar”, agregó el Ministerio de Hacienda.
Fuente: Dinero