Gobierno aumenta 7 % el salario mínimo por medio de decreto, ahora será de $689.454
Mediante decreto el Gobierno se vio en la obligación de fijar el salario mínimo en $689.454. Debido a que los gremios, los sindicatos de trabajo y el Gobierno no llegaron a un acuerdo en la cifra para fijar el SMLV, este subió $45.104 equivalente a un 7 %. Los líderes sindicales no están de acuerdo con este aumento, por lo tanto se anunciaron conversaciones con las centrales obreras para llamar a un paro cívico nacional. Por su parte Luis Alejandro Pedraza, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, explicó que quiere trabajar con estudiantes, campesinos e indígenas para tomar acción frente al aumento salarial puesto que ellos también se ven afectados por esta decisión.
Redacción INCP a partir de artículo publicado por Portafolio
Para mayor información, puede referirse al artículo titulado “Salario mínimo para 2016 es de $689.454” de la fuente Portafolio.
Salario mínimo para 2016 es de $689.454
Subsidio de transporte es de $77.700. Por segundo año consecutivo, el salario fue fijado por decreto. Centrales obreras criticaron la noticia, estudian paro cívico nacional.
El ministro de Trabajo, Luis Eduardo Garzón, anunció mediante su cuenta de Twitter que el próximo año el salario mínimo aumenta un 7 %, es decir, $45.104, y es de $689.454.
Garzón también confirmó que el subsidio de transporte se incrementa en un 5 % y será de $77.700.
Ante la noticia, Julio Roberto Gómez, líder sindical y presidente de la Confederación General del Trabajo, anunció conversaciones con las centrales obreras para convocar un paro cívico nacional y que se oficializaría en una rueda de prensa en la sede de la CGT.
“Es una noticia pésima. Queda en evidencia la mezquindad del Gobierno con los sectores más empobrecidos. Quien devenga el mínimo está en condiciones de precariedad. No es justo que no haya sido tenido en cuenta un incremento superior. No hubo gesto de generosidad”, añadió.
Por su parte, Luis Alejandro Pedraza, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), criticó al Gobierno al haber sido «consecuente con su compromiso adquirido con la OCDE y el FMI. No debe extrañar a nadie, siempre ha sido la política de Santos. Por eso no es extraño que la concertación haya fracasado. El Gobierno sabe que tiene el poder para determinar el mínimo. La concertación es solo un protocolo para aparentar discusión y análisis”.
Pedraza también afirmó que, en su momento, la CUT informará su plan de acción de cara al nuevo aumento decretado. “Queremos trabajar de la mano con campesinos, estudiantes e indígenas. Ellos también se ven afectados por este modelo económico”, puntualizó.
El secretario general de la CUT, Fabio Arias, lamentó una decisión, según él, “obediente a los empresarios. Dista mucho de atender los reclamos justos de los trabajadores».
«Según nuestros asesores económicos la inflación para estratos bajos, que son los que reciben el salario mínimo, va a estar en el 7,16 %. O sea que tendríamos un aumento por debajo inclusive de la inflación», explicó Arias a Caracol Radio.
Para el dirigente sindical, la decisión del Gobierno «muestra la mezquindad que hay en este tema» y agregó que este aumento, sumado a la reciente reforma tributaria, crea una «inconformidad creciente» de la sociedad puesto que las condiciones de pobreza «se van a disparar«.
«Era lo que se esperaba. Hay que contextualizar esta cifra con la realidad económica del país, el próximo año no será fácil«, aseguró Stefano Farné, director del Observatorio del Mercado de Trabajo de la Universidad Externado de Colombia, luego de conocer la noticia.
Guillermo Botero, presidente de Fenalco, concuerda con Farné y agrega que el incremento en un 7 % «es lo que se puede».
Según la dirección de empleo del Ministerio, 1 millón 700 mil colombianos reciben un salario mínimo y 1 millón 900 mil ganan menos de este monto.
Así fue la negociación
El 7 de diciembre pasado, el Gobierno Nacional, en cabeza del ministro de Trabajo, Luis Eduardo Garzón, instaló la mesa de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales.
Ese día, durante las primeras charlas técnicas, el Banco de la República informó que la inflación estaría cerca al 6,7 por ciento al finalizar el año.
El itinerario inicial fue modificado y la siguiente reunión, que estaba programada para el 9 de diciembre, tuvo que ser aplazada para un día después, a la espera de que el DANE revelara la cifra del PIB.
En la segunda reunión, que se realizó el 10 de diciembre, el Departamento Nacional de Planeación, (DNP) dio a conocer que la productividad para este 2015 se había situado en 0,5 por ciento.
Pero fue hasta la tercera sesión de la mesa de concertación laboral donde empezó la puja real, luego de que los empresarios y trabajadores destaparon sus cartas y dieron a conocer sus propuestas de manera formal, una vez enterados del comportamiento de la economía nacional.
Ese día- 12 de diciembre- los gremios propusieron un aumento de 6,8 por ciento, mientras que los sindicatos insistieron en un incremento entre el 10 y el 12 por ciento.
No obstante, en la reunión posterior, que tuvo lugar tres días después, es decir el 15 de diciembre, los trabajadores revisaron sus propuestas y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), al igual que la Confederación de Trabajadores de Colombia bajaron sus pretensiones de un aumento del 12 por ciento al 11%.
También la CGT cedió en su propuesta inicial, al pasar del 10 al 8,5 por ciento.
Aunque todo parecía indicar que al término de esa reunión habría humo blanco, las negociaciones finalizaron sin acuerdo, ya que los empresarios se mantuvieron en su posición inicial.
Tras la entrega de un informe individual de cada una de las partes al presidente Juan Manuel Santos, sobre las conclusiones de esta fase de negociación, el ministro de Trabajo continúo sus diálogos permanentes con los gremios y sindicatos para tratar de llegar a la concertación.
Por segundo año consecutivo el salario mínimo fue fijado por decreto.
Fuente: Portafolio