
En un panorama económico cada vez más globalizado y dinámico, el papel de los contadores ha pasado de la percepción de ser “devoradores de números” a ser asesores estratégicos y guardianes de la integridad financiera. Por ello, la necesidad de crear capacidades dentro de la profesión contable nunca ha sido más crítica. Estas capacidades incluyen el desarrollo de nuevos “puntos de acceso” a la profesión, debido al surgimiento de la entrega de información sobre sostenibilidad y la evidente necesidad de incluir más disciplinas en la contabilidad. Una de las formas más eficaces de lograrlo es mediante una reforma integral de la educación contable y la adopción de un enfoque basado en competencias. Los tiempos en que se dependía únicamente de un modelo de educación superior -como los posgrados- y de una educación formal cuyo estilo propio es enseñar y evaluar, no están a la altura de las expectativas de los empleadores, ni de la comunidad en general. Así pues, en este artículo se analiza cómo se pueden mejorar las habilidades y capacidades de los contadores a través de nuevas estrategias, garantizando que estén bien preparados para satisfacer las demandas del mundo financiero moderno.
La necesidad de una reforma de la educación contable
El trabajo de la Federación Internacional de Contadores (IFAC, por sus siglas en inglés) en la exploración y el intercambio de conocimientos sobre el futuro de la educación contable, incluidas las revisiones de las Normas Internacionales de Educación, debe ser aplaudido. Sin embargo, la educación contable tradicional ha sido blanco de frecuentes críticas por depender en gran medida de marcos de aprendizaje tradicionales que no han seguido el ritmo de las necesidades de los empleadores, ni las expectativas de la comunidad. En pocas palabras, existe un desfase entre la calidad de los graduados de las instituciones educativas y la que buscan los empleadores. Aunque los conceptos fundamentales son esenciales, la rápida evolución del entorno empresarial exige que los contadores cuenten con un conjunto de habilidades, incluyendo el pensamiento analítico, la competencia tecnológica y unos estándares éticos sólidos.
La reforma a la profesión contable busca abordar dichas brechas mediante la integración en el marco educativo de habilidades prácticas, la validación de las competencias adquiridas y las aplicaciones en la vida real. Este cambio no solo implica actualizar el contenido, sino también transformar los métodos pedagógicos (aprendizaje y enseñanza) utilizados para transmitir el conocimiento; por ejemplo, incorporando una evaluación verificable del Reconocimiento de Aprendizajes y Competencias Previas, la cual refleje las competencias adquiridas a lo largo de la vida laboral del profesional para nuevos aspirantes con experiencia o microcredenciales modulares integrales que se pueden acumular para demostrar sus competencias. Así, se combinan los modos de evaluación para incluir la experiencia práctica que da cuenta de los desafíos que enfrentarán los profesionales en sus carreras. Son especialmente importantes los modos de evaluación que exploran la capacidad de las competencias de los estudiantes para integrar conocimientos, habilidades y el impacto de las incertidumbres. En última instancia, se debe hacer un cambio en el paradigma crítico para tomar distancia del modelo tradicional de educación y certificación profesional, el cual evalúa la capacidad de presentar un examen o de ser dirigido hacia un régimen de evaluación predeterminado y con enfoque limitado. Por el contrario, se debe elegir un modelo donde el estudiante o candidato pueda demostrar sus habilidades para el trabajo, es decir, haga una demostración de sus competencias en lugar de una demostración de sus habilidades para responder un examen.
Además, el trabajo para llevar a cabo la reforma debe hacer énfasis en la importancia del aprendizaje continuo. Conforme surgen nuevas tecnologías y normatividad, los contadores deben actualizar continuamente sus conocimientos y habilidades. Por lo tanto, las instituciones educativas y los organismos profesionales deben crear rutas para el desarrollo y la certificación profesional continuos, asegurando que los contadores sigan siendo relevantes y competentes a lo largo de sus carreras.
El enfoque basado en competencias
Un enfoque de educación contable basado en competencias se centra en el desarrollo de marcos que demuestren el dominio de varias áreas de competencia. El Instituto de Contadores Públicos (Australia) y el Grupo IPA (Institute of Public Accountants, por sus siglas en inglés) han dedicado los últimos dos años a realizar una revisión exhaustiva de su marco educativo. Han realizado una revisión de los planes de estudio y mapeado más de 19.000 unidades de competencia extraídas de las normas de educación de la IFAC a las obligaciones estatutarias de las unidades de contabilidad tradicionales. Además, han revisado fuentes internacionales de marcos de competencias de disciplinas adyacentes y relacionadas, con lo cual, agruparon 50 microcredenciales y áreas de competencia en tres dominios específicos: competencias técnicas (contables), competencias profesionales y competencias transdisciplinarias. Estos dominios luego conforman cinco certificados, cuya culminación es el programa de Certificación global del contador público (GCPA, por sus siglas en inglés). Además, el IPA ha desarrollado un modelo para un sistema integral de reconocimiento de aprendizaje previo completo, verificable y en línea, el cual evaluará de forma rápida y fácil las competencias de un candidato frente al nuevo marco global de competencias. Es importante destacar que la mayor parte de este marco es universal y el IPA está dispuesta a compartir esta información con cualquier organismo miembro de la IFAC. A diferencia de los modelos educativos tradicionales que priorizan el conocimiento teórico, el marco basado en competencias está orientado a los resultados, lo que significa que está diseñado para garantizar que los estudiantes puedan demostrar las competencias exigidas en la profesión.
Una de las principales ventajas de un enfoque basado en competencias es su flexibilidad, pues permite a los estudiantes progresar a su propio ritmo: avanzan solo cuando han demostrado dominar una competencia en particular. Esta experiencia de aprendizaje personalizada puede adaptarse a diferentes estilos y ritmos de aprendizaje, lo que hace que la educación sea más accesible y eficaz, y genere confianza entre los empleadores y la comunidad en cuanto a la relevancia actual de la profesión.
El Marco de competencias del Grupo IPA incorpora las competencias previstas en materia de ética, contabilidad financiera y de gestión, evaluación de riesgos, finanzas, auditoría e impuestos. Las habilidades profesionales incorporan el trabajo en equipo, liderazgo, resolución de problemas, aprendizaje autónomo y bienestar, pensamiento crítico y comunicación. Las competencias transdisciplinarias incluyen campos incipientes como la ciberseguridad, la perspicacia digital, el análisis de datos y el área crítica de la sostenibilidad. Estas áreas de competencias seguirán evolucionando y actualizándose mientras el contador siga siendo el asesor confiable de la comunidad.
Estrategias de implementación
Implementar estas reformas exige valentía, pero no hay tiempo que perder. Si no damos un paso al frente y lideramos este asunto, otras profesiones lo harán y corremos el riesgo de ser prescindibles. Estas reformas son difíciles, pero los consejos y juntas de Organizaciones Profesionales de Contaduría (PAO, por sus siglas en inglés) deben priorizar la innovación en la educación contable. Innovar significa hacer algo nuevo, no solo hacer lo mismo de formas nuevas. Para efectuar este cambio necesitamos construir alianzas sólidas con las partes interesadas, incluyendo universidades y colegios; los reguladores y considerar el apetito de inversión en Tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC). Es importante reflexionar sobre el ejemplo del IPA mientras implementa el nuevo marco de competencias y el programa GCPA, el cual funcionará de forma simultánea con las rutas tradicionales. Tomará tiempo ponerlo en marcha y consolidarlo, por lo que debemos actuar con rapidez para implementarlo, pero tener paciencia para que surta efecto.
Los beneficios
Al evaluar los beneficios, la pregunta que debemos considerar es ¿cuál es la desventaja? Al responder a las exigencias del mercado, demostramos y reforzamos nuestra relevancia. Mediante el desarrollo de nuevas rutas aumentamos nuestro número de miembros, la viabilidad y la sostenibilidad de las PAO de forma controlada. Al implementar modelos de competencias para la admisión y la certificación, ejerceremos presión para realizar cambios en los modelos tradicionales de la educación contable. En última instancia, esto dará como resultado una mayor relevancia de nuestras aptitudes. Para los estudiantes, la reforma supondrá una experiencia de aprendizaje más atractiva y relevante que los preparará de mejor manera para las exigencias de profesionales. Para los empleadores, garantizará que los graduados posean las habilidades y competencias necesarias para contribuir de manera eficaz desde el primer día. Además, un beneficio a largo plazo es que la reforma permite pensar en nuevas ideas hacia una convergencia de disciplinas, junto con la acelerada evolución de la tecnología.
En conclusión, la creación de capacidades en la contabilidad a través de una reforma educativa y un enfoque basado en competencias es esencial para enfrentar los desafíos del entorno financiero moderno. Al centrarnos en las habilidades prácticas y las aplicaciones de la vida real, y garantizar que el aprendizaje sea continuo y adaptable, podemos preparar una nueva generación de contadores que no solo cuenten con los conocimientos necesarios, sino que también sean competentes y estén preparados para impulsar la profesión. Mientras sale el sol en este amanecer de una nueva área, la pregunta es: ¿abrazas la luz o buscas protegerte de ella?
Este artículo se publicó originalmente como Dawn of a New Era: Building Capacity in Accountancy through Competency-Based Education Reform del órgano de contadores profesionales International Federation of Accountants.
Autores: Harpal Singh
“Este documento titulado “Dawn of a New Era: Building Capacity in Accountancy through Competency-Based Education Reform” que la Federación Internacional de Contadores (IFAC) publicó en inglés el 27 de junio de 2024, lo ha traducido al español el Instituto Nacional de Contadores Públicos de Colombia (INCP) el 17 de julio de 2024 y se utiliza con permiso de IFAC. El texto aprobado de todas las publicaciones de IFAC es aquel que IFAC publique en lengua inglesa. La IFAC no asume responsabilidad por la exactitud y completitud de la traducción ni por ninguna medida que se tome como consecuencia de lo anterior.
Texto en inglés del documento titulado “Dawn of a New Era: Building Capacity in Accountancy through Competency-Based Education Reform”, © 2024 cuyo autor es la Federación Internacional de Contadores (IFAC). Todos los derechos reservados.
Texto en español del documento titulado “El amanecer de una nueva era: crear capacidades en la contabilidad mediante una reforma educativa basada en competencias”, © 2024 cuyo autor es la Federación Internacional de Contadores (IFAC). Todos los derechos reservados.
Título original: “Dawn of a New Era: Building Capacity in Accountancy through Competency-Based Education Reform”.
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