Ventajas de la auditoría para empresas familiares – Uruguay
En Uruguay y en el resto de Latinoamérica, las PYMEs son responsables de gran parte del PBI, así como de una alta generación de empleo. Las empresas familiares contribuyen a la sociedad con su actividad, creando cadenas de valor en la intermediación de productos servicios y aportando un modelo de trabajo basado en la confianza, en el afán de superación y en la trasmisión de valores de una a otra generación. Es evidente la necesidad de que cuenten con una estructura adecuada, con herramientas y con apoyo para poder gestionar sus riesgos administrativos, operativos, financieros y así diseñar con eficacia su mejor estrategia de desempeño y crecimiento. Y sin embargo, no es así como se desarrolla en nuestro país, donde gerentes y responsables debieran encontrar guías y soluciones, aparecen en cambio un sinfín de obstáculos, algunos del día a día y otros que hacen tambalear tanto el bienestar de pequeñas empresas emergentes como de sólidas firmas de trayectoria.
¿Qué puede hacer una auditoría para ayudar en el desempeño de una empresa familiar?
Por sus particularidades, las pequeñas y medianas empresas afrontan limitaciones y dificultades que suelen acentuarse en momentos de crecimiento, que pueden poner en riesgo su buen funcionamiento o amenazar su supervivencia. Contar con un servicio de auditoría es muy beneficioso al momento de atravesar situaciones claves como: crecimiento, financiación y continuidad o cambio de mando.
Es importante destacar que una auditoría no es solo la verificación cuantitativa y cualitativa de saldos incluidos en un balance con el objetivo de emitir un informe sobre el mismo. Resulta también erróneo pensar en la auditoría como un estricto proceso de fiscalización sobre el cumplimiento de normas o sobre el alcance de resultados. En cambio, una auditoría para una PYME agrega valor a sus accionistas y directores, otorgando seguridad respecto de la información utilizada en la toma de decisiones, y aportando confianza a sus proveedores y empleados.
La auditoría es una herramienta muy valiosa para una empresa, facilita la planificación y la prevención de dificultades, así como también pone de manifiesto falencias en el control interno y ayuda en la salvaguarda de los activos.
Toda auditoría es llevada a cabo por un grupo de profesionales que, además de contar con los conocimientos técnicos adecuados y la debida experiencia, realiza un trabajo en equipo, donde participan profesionales de diferentes áreas (contadores, licenciados en administración ingenieros y otros expertos). El trabajo se planifica en etapas, para lo cual se elabora un plan de acción en base a las expectativas y necesidades del cliente. La información que se reúne es verificada mediante inspección, observación y otros procedimientos, para dejarle a la empresa un valioso feedback sobre la mesa y el contraste con las normas contables utilizadas para la preparación de sus estados contables.
Como consecuencia, pueden surgir debilidades que será necesario solucionar: detección de robo de activos, necesidad de separar funciones entre los empleados, políticas contables mal aplicadas y otros cambios necesarios y positivos para la empresa. Una auditoría proporciona una mirada objetiva e independiente, que ayuda a los directivos a alinear las metas y a los empleados a conocer mejor su rol dentro de la empresa y a sentirse más comprometidos.
Fuente: elobservador.com.uy