La excelencia profesional está al alcance de todo auditor que realmente desee mejorar sobre bases firmes, siempre y cuando esté preparado para el servicio, el sacrificio y la lucha constante para alcanzar y asumir la responsabilidad de estar vivo en el presente.

 Los retos de la excelencia señalan que ser excelente profesionalmente es:

1. La primera buena impresión.
2. Profundidad de conocimientos.
3. Abundancia de conocimientos.
4. Entusiasmo.
5. Buen sentido del humor.
6. Habilidad para concentrarse, tanto en detalles como en el marco general.
7. Creatividad: hay que tenerla, propiciarla y practicarla.
8. Hacer las cosas y no buscar razones para evitarlas.
9. Trazar un plan y lograr los objetivos deseados pese a todas las circunstancias.
10. Saber decir “me equivoqué” y proponerse no cometer el mismo error.

Fuente: Auditool – Por Mauricio Guillermo Díaz Villate